martes, 3 de diciembre de 2013

La alimentación en navidad.

Las navidades suelen ser muy dulces y calóricas, y demasiado tentadoras en cuanto a alimentos y comidas se refiere. La cosa se complica si estas a dieta, ya que seria difícil y absurdo el obligarse a cumplirla. Pero no por ello tenemos la excusa perfecta para tirar por la borda todo el trabajo del año.
Lo primero anticipate a las compras, cuanto mas cerca estamos de las fechas señaladas, mas caras resultan. Opta por productos congelados, totalmente garantizadas sus propiedades nutricionales y por supuesto mas económicos. Opta por recetas tradicionales, suelen ser mas equilibradas, disfruta de ese momento familiar y divertido en la cocina a la hora de preparar el menú.
Intenta que si el plato principal es carne o pescado, que su acompañamiento sean verduras. Los aperitivos si son de marisco (cuidado con su contenido en ácido úrico) no los combines con embutidos, opta mejor por setas o ensaladas. A la hora del postre unas rodajas de piña serian de buena ayuda, ya que sus encimas te ayudan con la digestión.
Los turrones, polvorones y demás dulces, no tendríamos problemas si los consumimos con moderación. Puedes disfrutar de todo, reduciendo las cantidades. Sírvete la comida por ejemplo en platos pequeños.


En estas fechas y en una cultura como la nuestra, el alcohol esta muy presente en este tipo de celebraciones. Al igual que los alimentos, debemos tener en cuenta su moderación, ya que la combinación de alcohol y grasas no son nada aconsejables.
Limitemos su consumo a una copa de vino o cerveza y otra de sidra o cava para el brindis.
Los churros con chocolate de la mañana permitetelos solo en una única ocasión (por ejemplo en Año Nuevo).
En los demás días, sigue tu dieta habitual (nunca dejes de comer o saltarte comidas), mucha agua, haz hincapié en las verduras y proteínas, reduce un poco (nunca los suprimas) los carbohidratos. Y por supuesto no dejes de ejercitarte!
Puedes preparar tus platos tradicionales navideños, en su versión mas light (en vez de fritos, a la plancha u horneados).


Deciros a tod@s que sí se puede disfrutar de las deliciosas comidas, cenas y dulces navideños, sin culpabilidad y sin notarlo mucho en nuestro peso. La clave es la moderación y sobre todo el disfrutar del buen ambiente familiar.
Os deseo que paséis unas muy buenas fiestas y ante todo que sigáis saludables y bien nutridos.